Carta a los habitantes de Efeso

 Estructura

La carta tiene una estructura bastante clara: la distinción entre una primera y una segunda parte es particularmente clara.

Primera parte Ef 1, 1-3, 21

— Discurso, saludo, bendición y oración 1, 1-23

— Meditación sobre la unidad entre judíos y paganos 2, 1-22

— Pablo apóstol de los no judíos 3, 1-21

Segunda parte 4, 1-6, 24

— Exhortación a la unidad y a la vida nueva 4, 1-32

— Exhortación a nuevas relaciones familiares 5, 1-6, 9

— Exhortación a luchar; conclusión 6, 10-24

La carta a los Efesios es conocida como el Deuteronomio Paulino. Esto se debe porque tiene muchas similitudes con la de los Colosenses. De esta manera, manifiesta una seria preocupación por la mentalidad sincretista que prevalecía y desorientaba a los cristianos del siglo I d.C. hacia valores no cristianos, pero, a diferencia de los colosenses, aborda este problema de una manera más tranquila y con más ideas teológicas.

Está epístota más que un escrito dirigido a una comunidad específica, es un escrito "circular" o "encíclica", enviado - como dice el texto - a todos los creyentes: "a todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo" (cf. Ef  6, 24).

El apóstol Pablo se presenta prisionero, pero de Cristo (3, 1; 4, 1). Su encarcelamiento social es consecuencia de su elección radical por Jesús que lo conquistó y lo envió a anunciarlo a todos (Flp 3,12).

A continuación, se presenta un ejemplo de como la carta a los Efesios es una copia de la carta a los Colosenses y por tanto, se consideran cartas hermanas:

Colosenses

Efesios

1, 13-14: "Él nos arrebató de la potestad de las tinieblas y nos transportó al Reino de su Hijo amado, en quien tenemos la redención, el perdón de los pecados".

1, 7: "...para alabanza y gloria de su gracia con que nos ha honrado en el Amado. Es por su sangre que tenemos redención, el perdón de pecados."

2, 13: "Por vuestras transgresiones y por la incircuncisión de vuestra carne estabais muertos, y él os dio vida juntamente con Cristo. Él os perdonó vuestras transgresiones".

2, 1.5a: "Estabas muertos en tus delitos y pecados... Cuando nosotros estábamos muertos en nuestros pecados, él nos dio vida juntamente con Cristo".

2, 19: "... ignorando la Cabeza, por la cual todo el Cuerpo, alimentado y cohesionado por las coyunturas y ligamentos, crece en Dios".

4, 16: "...cuyo Cuerpo, en su totalidad, bien ajustada y unida por cada coyuntura y ligadura, con el funcionamiento armonioso de cada una de sus partes, realiza su crecimiento para su propia edificación en el amor".

Los ejemplos son innumerables, pero son suficientes para mostrar que Efesios depende de Colosenses, copiando y ampliando la reflexión.






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